En este artículo, Juan José Millán, explica qué mide la subescala Semejanzas del WISC IV, qué dificultades puede detectar y cómo puede estimularse.

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Suprueba Semejanzas WISC IV

Qué mide la Subescala Semejanzas del WISC IV

La escala Semejanzas del WISC-IV (Wechsler Intelligence Scale for Children, 4th Edition) es una subprueba de la prueba de inteligencia que mide el pensamiento abstracto y el razonamiento verbal.

La aplicación de la escala Semejanzas del WISC-IV se realiza de manera individual en un ambiente que debe ser tranquilo y sin distracciones. El evaluador presenta dos palabras o conceptos y el escolar debe describir en qué se parecen. Por ejemplo, si se presentan las palabras «tren» y «barco», el evaluado podría responder que ambos son medios de transporte.

La prueba consta de 21 ítems que se vuelven cada vez más difíciles a medida que avanza.

La información que se obtiene de la escala Semejanzas del WISC-IV es una medida de la capacidad para encontrar semejanzas entre diferentes conceptos. Se utiliza para evaluar la capacidad de pensamiento abstracto y de razonamiento.

En términos de áreas del desarrollo, la escala Semejanzas del WISC-IV se relaciona con la capacidad para comprender conceptos abstractos y para el razonamiento verbal. También puede ayudar a identificar dificultades en el procesamiento de información y en la comprensión del lenguaje.

Las dificultades que se pueden identificar a través de la escala Semejanzas del WISC-IV incluyen problemas de atención y concentración, dificultades en el procesamiento del lenguaje, problemas de memoria y de razonamiento abstracto.

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En qué influyen las dificultades del pensamiento abstracto en el aprendizaje escolar

Las dificultades del pensamiento abstracto pueden tener un impacto significativo en el aprendizaje escolar. El pensamiento abstracto se relaciona con la capacidad de comprender conceptos complejos, resolver problemas y hacer inferencias.

Si un escolar tiene dificultades para pensar abstractamente, es probable que tenga dificultades para comprender relacionar conceptos abstractos con situaciones de la vida real.

Esto puede tener un impacto en varias áreas del aprendizaje escolar. Por ejemplo, en matemáticas, un escolar con dificultades de pensamiento abstracto puede tener problemas para entender conceptos relacionados con la geometría, la estadística y el álgebra.

En ciencias, puede tener dificultades para comprender conceptos abstractos como la teoría de la evolución o la teoría de la relatividad.

En lenguaje, puede tener problemas para entender el significado de palabras difíciles o para inferir el significado de una oración compleja.

Además, las dificultades del pensamiento abstracto también pueden afectar la capacidad del niño para resolver problemas. Si un niño tiene dificultades para pensar abstractamente, puede que le resulte difícil encontrar soluciones a problemas que requieren la aplicación de conceptos abstractos o la resolución de problemas complejos.

Por tanto, las dificultades del pensamiento abstracto tener un impacto significativo en su desempeño académico en general, siendo realmente importante identificar y abordar estas dificultades para ayudar al niño a desarrollar su capacidad de pensamiento abstracto y mejorar su aprendizaje escolar.

¿Cómo se estimula el pensamiento abstracto?

El pensamiento abstracto puede resultar un área compleja de estimular, no obstante, existen diferentes estrategias y actividades que pueden ayudar a estimularlo en escolares:

  1. Preguntas abiertas: Hacer preguntas abiertas que requieran respuestas más complejas y que no sean simplemente una respuesta verdadera o falsa, pueden ayudar a fomentar el pensamiento abstracto. Por ejemplo, «¿Qué pasaría si…?» o «¿Cómo podrías resolver este problema de manera diferente?».
  2. Analogías: Las analogías son una excelente manera de desarrollar el pensamiento abstracto. Presentar una situación, problema o concepto y pedir a los niños que piensen en algo similar o comparable, puede ayudarles a desarrollar habilidades de razonamiento abstracto.
  3. Rompecabezas y juegos: Los rompecabezas y los juegos que requieren pensar y resolver problemas pueden ayudar a estimular el pensamiento abstracto. Juegos como ajedrez, scrabble, sudokus, entre otros, pueden ayudar a desarrollar habilidades de pensamiento abstracto.
  4. Arte y música: Las actividades artísticas y musicales también pueden ayudar a fomentar el pensamiento abstracto.
  5. Lectura y discusión: Leer y discutir obras literarias con cierta complejidad, siempre guiados por docentes o profesionales de la psicopedagogía para poder ofrecer herramientas y no generar frustración puede ayudar a estimular el pensamiento abstracto.

En qué influyen las dificultades del razonamiento verbal en el aprendizaje escolar

El razonamiento verbal se refiere a la capacidad de comprender y procesar información verbal, incluyendo la comprensión del lenguaje y la capacidad para expresar ideas y pensamientos verbalmente. Si un escolar presenta dificultades para razonar verbalmente, es probable que tenga problemas para entender el lenguaje y expresarse verbalmente de manera efectiva.

Esto puede tener un impacto en varias áreas del aprendizaje escolar. Por ejemplo, en lectura y escritura, un niño con dificultades de razonamiento verbal puede tener problemas para comprender y retener información en textos escritos, y también puede tener dificultades para expresarse por escrito.

En matemáticas, puede tener dificultades para entender problemas verbales y para aplicar el razonamiento verbal en la solución de problemas.

Además, las dificultades del razonamiento verbal también pueden afectar la capacidad del escolar para participar en discusiones y debates en clase, y para comprender conceptos y explicaciones verbales presentados por el docente.

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Cómo se estimula el razonamiento verbal

Una vez analizado qué mide la subescala semejanzas del WISC IV tras su aplicación a un escolar, conviene saber cómo podemos estimular el razonamiento verbal.

El razonamiento verbal puede ser estimulado mediante la implementación de diversas estrategias y actividades que ayuden a los escolares a desarrollar su capacidad para comprender y procesar la información verbal. Algunas formas de hacerlo pueden ser:

  1. Lectura y discusión: La lectura de textos complejos y la discusión de los mismos enfocada a la resolución de preguntas abiertas y discusión para que los niños puedan expresar sus ideas y puntos de vista es una gran estrategia.
  2. Juegos de palabras: Los juegos de palabras como el scrabble, adivinanzas, sopa de letras, entre otros, pueden ser útiles para estimular la capacidad de razonamiento verbal.
  3. Debate y argumentación: La argumentación y el debate puede emplearse para animar a los escolares a defender su punto de vista y escuchar y respetar los puntos de vista de los demás puede ser beneficioso para mejorar sus habilidades de razonamiento verbal.
  4. Narración de historias: La narración de historias puede ser útil si trabajamos en la línea de solicitar a los escolares que cuenten historias o que describan situaciones imaginarias.
  5. Escritura: La escritura sobre sus ideas y pensamientos puede ser beneficiosa para mejorar su capacidad de razonamiento verbal.

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Artículo escrito por Juan José Millán.

Juan José MIllán Estañ

Juan José Millán es Diplomado en Magisterio, Licenciado en Psicopedagogía y Máster en Neuropsicología Infantil.

Lleva a cabo tareas de Evaluación Psicopedagógica y creación de contenidos en el Podcast Educativo, en su Web personal y en YouTube.