En esta entrada, Juan José Millán, explica qué es un niño con Alta Sensibilidad. Un artículo de gran necesidad ya que la educación, desde el rol de padres, de madres, de cuidadores principales, de docentes… es sin duda alguna una tarea compleja y desafiante, especialmente cuando sospechamos que nuestro hijo puede ser altamente sensible.

La alta sensibilidad es una característica inherente que afecta a aproximadamente el 15-20% de la población, y se manifiesta a través de una mayor receptividad emocional, una mayor sensibilidad a los estímulos sensoriales y una tendencia a la reflexión profunda.

Los niños altamente sensibles tienen muchas cualidades positivas, como la empatía y la creatividad, pero también pueden enfrentarse a desafíos específicos que son difíciles de identificar y abordar.

En este artículo, vamos a abordar la alta sensibilidad, con estrategias de valor para ayudarte a comprender mejor a tu hijo o a tu estudiante con alta sensibilidad.

¿Qué es un niño con Alta Sensibilidad?

La alta sensibilidad en los niños es un rasgo que se refiere a la capacidad de los niños para percibir y procesar los estímulos de manera más intensa que otros. Esta condición, también conocida como alta sensibilidad sensorial (HSS), fue descrita por la psicóloga Elaine Aron en 1996 y ha sido objeto de numerosos estudios desde entonces.

La alta sensibilidad en los niños se caracteriza por una mayor reactividad a los estímulos sensoriales, como el ruido, la luz, los olores y las texturas. Estos niños son más conscientes de los cambios en su entorno y pueden sentirse abrumados por las experiencias sensoriales intensas.

Según la Dra. Aron, aproximadamente el 20% de la población tiene este rasgo, por lo que es importante reconocer y comprender esta condición para poder apoyar a los niños que la presentan.

En un estudio publicado en la revista Frontiers in Psychology en 2015, se encontró que los niños con alta sensibilidad tenían una mayor actividad cerebral en áreas asociadas con la atención, la emoción y la toma de decisiones, lo que sugiere que los niños con alta sensibilidad pueden procesar los estímulos sensoriales de manera más profunda y detallada que otros niños.

Los niños con alta sensibilidad también pueden ser más propensos a la ansiedad y a las alteraciones del estado de ánimo, debido a su mayor sensibilidad emocional. En un estudio publicado en la Journal of Clinical Child and Adolescent Psychology en 2018, se encontró que los niños con alta sensibilidad tenían mayores niveles de ansiedad y una mayor sensibilidad emocional que los niños sin este rasgo.

Es importante tener en cuenta que la alta sensibilidad no es una condición médica ni psiquiátrica, sino un rasgo de la personalidad. Los niños con alta sensibilidad pueden tener una gran capacidad para la empatía y la compasión, así como una mayor sensibilidad artística y creativa.

Para dar la mejor respuesta a los niños con alta sensibilidad, es importante ofrecer un entorno seguro y acogedor que les permita procesar los estímulos de manera efectiva. Esto puede incluir la reducción de los estímulos sensoriales intensos, como el ruido y la luz, y proporcionar un ambiente tranquilo y relajante.

También es importante ofrecer un apoyo emocional adecuado para ayudar a los niños a manejar sus emociones de manera efectiva.

Podcast Educativo sobre Niños con Alta Sensibilidad

En el episodio 220 del Podcast Educativo, abordamos el tema de la Alta Sensibilidad en población Infantil.

Características de niños con Alta Sensibilidad 

Los niños con alta sensibilidad pueden presentar una serie de características y comportamientos que los distinguen de otros niños. A continuación, se describen algunas de las características más comunes que se asocian con la alta sensibilidad en los niños:

1. Sensibilidad a los estímulos sensoriales: Los niños con alta sensibilidad pueden ser muy sensibles a los estímulos sensoriales, como el ruido, la luz, los olores y las texturas. Pueden sentirse abrumados por los estímulos intensos y necesitar un ambiente tranquilo y relajado para sentirse cómodos.
2. Empatía y compasión: Los niños altamente sensibles suelen ser muy empáticos y compasivos con los demás. Pueden ser muy conscientes de los sentimientos y necesidades de las personas que les rodean y pueden sentirse afectados por el sufrimiento de los demás.
3. Sensibilidad emocional: La presencia de una mayor sensibilidad emocional y una mayor propensión a sentir ansiedad, tristeza o miedo, son algunas notas características. Pueden ser muy conscientes de sus propias emociones y necesitar tiempo para procesarlas y comprenderlas.
4. Percepción detallada: Los niños con alta sensibilidad pueden ser muy perceptivos y notar detalles que otros niños no perciben. Pueden ser muy conscientes de los cambios en su entorno y pueden procesar los estímulos sensoriales de manera más profunda y detallada que otros niños.
5. Creatividad y sensibilidad artística: Estos escolares, suelen presentar una gran capacidad para la creatividad y la expresión artística. Pueden tener una sensibilidad especial hacia la música, la pintura o la poesía y pueden disfrutar de actividades que les permitan explorar su mundo interior.

Es importante tener en cuenta que cada niño es único y que no todos los niños con alta sensibilidad presentan las mismas características, pero comprendiendo bien estas 5 características comunes a la gran mayoría de niños altamente sensibles, podemos entender las características y comportamientos asociados con la alta sensibilidad y, consecuentemente, podremos ayudar a los niños a aprovechar su capacidad única para procesar los estímulos de manera profunda y creativa.

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Artículo escrito por Juan José Millán.