Es decir, hacemos referencia a las tareas de enumerar cuántas cosas pueden encontrarse en cada sitio, darle un nombre de número a cada uno de los elementos y poder asociar diferentes elementos con un número en concreto.
En estas tareas es donde vamos a encontrar los errores más habituales, pero también vamos a encontrar estos errores en actividades propias de comparación, como por ejemplo actividades en las que se compara un número con otro, comparamos un número tratando de buscar otro mayor, menor o igual, o tareas en las que tenemos que comparar, a modo de problema, diferentes listas de precios para posteriormente realizar preguntas en las que las diferencias entre unas listas y otras entren en juego.