En esta entrada Juan José Millán analiza los diferentes Estilos Motivacionales, exponiendo las dificultades que podemos encontrar en ellos así como diferentes estrategias para hacerles frente.

Estilos Motivacionales

La motivación es esencial para el aprendizaje escolar ya que es un factor determinante en la adquisición de conocimientos y habilidades. Cuando las personas están motivadas, están más dispuestas a invertir un elevado esfuerzo en las tareas, perseguir metas académicas y a mantener una actitud positiva hacia el aprendizaje.

La motivación también influye en la elección de metas y en el enfoque en el aprendizaje. Por ejemplo, un estudiante motivado puede elegir metas académicas desafiantes y trabajar duro para alcanzarlas, mientras que un estudiante poco motivado puede reducir sus expectativas, elegir metas menos ambiciosas y no poner tanto esfuerzo en el aprendizaje.

Te dejo este enlace a nuestra newsletter educativa en la que te hablo sobre el poder de las expectativas desde el rol docente y desde el rol de padres y madres, y también te dejo el enlace de telegram, donde en el episodio 2 del podcast exclusivo que publico únicamente en este canal, abordo el tema.

Además, la motivación puede influir en la forma en que se procesa y se retiene la información. Los estudiantes motivados tienden a prestar más atención, a procesar la información de manera más activa y a retener la información de manera más efectiva.

Por tanto, la motivación es esencial para el aprendizaje escolar ya que influye en el esfuerzo y enfoque en el aprendizaje, en la elección de metas y en la forma en que se procesa y se retiene la información. Una de las principales como padres, madres, docentes o profesionales de la Psicopedagogía es la de fomentar y mantener la motivación en los estudiantes para lograr un aprendizaje efectivo.

La motivación enfocada a resultado

La motivación enfocada a resultado se refiere a la tendencia de las personas a enfocarse en los resultados finales de sus acciones, en lugar de en el proceso o el esfuerzo necesario para alcanzarlos. Las personas con una motivación enfocada a resultado suelen estar motivadas por metas concretas y pueden trabajar duro para alcanzarlas.

Suelen estar dispuestos a asumir riesgos y a sacrificar el proceso en aras de alcanzar un resultado específico. También tienden a ser más competitivos y a compararse con los demás para medir su propio éxito.

La motivación enfocada a resultado puede ser beneficiosa en algunas situaciones, ya que puede conducir a un mayor rendimiento y logro de metas. Sin embargo, también puede generar estrés y ansiedad, y puede llevar a una falta de disfrute del proceso y a dejar de lado el aprendizaje y crecimiento personal.

La motivación enfocada a logro

La motivación enfocada en el logro, también conocida como motivación de logro, se refiere a la tendencia de una persona a buscar desafíos y superar metas específicas. Las personas con motivación de logro tienden a establecer metas ambiciosas y a invertir recursos personales para alcanzarlas, llegando a priorizar el cumplimiento de las metas frente a otros aspectos de ocio, disfrute o similar. A menudo se sienten altamente motivadas por el deseo de ser reconocidos por sus logros.

La motivación de logro resulta beneficiosa, ya que puede conducir a un rendimiento alto y al logro de metas importantes. Sin embargo, puede llevar a una situación en la que el escolar, comience a generar una importante construcción cognitiva sobre la negación del fracaso, cuando no consigue alcanzar sus expectativas, así como a minimizar la importancia de las relaciones interpersonales o el bienestar emocional.

Es importante tener en cuenta que la motivación enfocada en el logro es diferente a la motivación enfocada a resultado, ya que la motivación enfocada en el logro se centra en superar metas personales y en el aprendizaje y crecimiento personal, mientras que la motivación enfocada a resultado se centra en alcanzar un resultado específico, independientemente del proceso, el esfuerzo necesario para alcanzarlo, o el aprendizaje obtenido.

Motivación intrínseca en escolares

La motivación intrínseca se refiere al interés y el entusiasmo que un estudiante siente por el aprendizaje en sí mismo, independientemente de las recompensas externas o castigos. Los estudiantes con una alta motivación intrínseca son propensos a buscar desafíos y a perseguir metas académicas por el propio placer de aprender y mejorar.

La motivación intrínseca es importante en el aprendizaje escolar porque se relaciona con un mayor rendimiento académico, una mayor retención de información y una mayor satisfacción con el aprendizaje. Los estudiantes con una alta motivación intrínseca tienden a ser más autodirigidos y a buscar la retroalimentación de los profesores y figuras de referencia para mejorar en su actividad escolar.

Existen varias estrategias que los maestros y padres pueden utilizar para fomentar la motivación intrínseca en los estudiantes. Tres estrategias que generan mucho impacto son:

Motivación extrínseca en escolares

La motivación extrínseca en escolares se refiere a la motivación que proviene de factores externos, como recompensas o castigos. Los estudiantes con una alta motivación extrínseca pueden estar motivados por el deseo de obtener una buena calificación para recibir un premio o evitar un castigo de forma exclusiva.

Un escolar con motivación predominante extrínseca, obtendrá buenos resultados si los estilos educativos utilizan recompensas para motivarle a completar tareas específicas o alcanzar metas académicas. Sin embargo, puede tener efectos negativos a largo plazo, ya que los estudiantes pueden depender de las recompensas externas y pueden perder el interés en el aprendizaje una vez que las recompensas ya no están disponibles o los resultados no sirvan para evitar consecuencias o situaciones no deseadas.

Equilibrio entre Motivación Extrínseca e Intrínseca

Es importante equilibrar la motivación intrínseca y extrínseca en el aprendizaje escolar, ya que la combinación de ambas puede ser más efectiva en el logro académico a largo plazo. Los maestros y padres pueden fomentar la motivación extrínseca proporcionando recompensas, pero sobre todo, convirtiendo la recompensa en reconocimiento para el buen desempeño académico, mientras que también fomentan la motivación intrínseca a través de oportunidades para el aprendizaje autodirigido y la exploración.

Principales problemas de la motivación escolar

Existen varios problemas de motivación escolar que pueden afectar el aprendizaje y el rendimiento académico, algunos de los cuales incluyen:

1. Falta de motivación intrínseca: En este caso encontraremos a un escolar con una marcada ausencia de interés o entusiasmo por el aprendizaje en sí mismo. Los estudiantes con una baja motivación intrínseca pueden tener dificultades para motivarse a sí mismos, rebajando sus expectativas y siendo menos propensos a poner esfuerzo en el aprendizaje.
2. Falta de motivación extrínseca: Cuando un escolar carece de motivación extrínseca, puede encontrarse dicha situación en la ausencia de factores externos que impulsen el aprendizaje, como recompensas o evitar situaciones no deseadas. Los estudiantes con una baja motivación extrínseca pueden ser menos propensos a responder a las expectativas y las demandas del entorno académico.
3. Problemas de autoeficacia: La autoeficacia hace referencia a la creencia de un escolar de que es capaz de alcanzar metas y superar obstáculos. Los estudiantes con problemas de autoeficacia pueden tener dificultades para motivarse a sí mismos, ya que pueden creer que no son capaces de alcanzar sus metas académicas.
4. Problemas emocionales o conductuales: Si en un escolar concursan alteraciones tales como la depresión, el estrés o dificultades de aprendizaje, es muy probable que su motivación escolar se vea afectada negativamente. Los estudiantes con estas dificultades suelen tener problemas para enfocarse en el aprendizaje, siendo muy habitual que se sientan abrumados o desmotivados.
5. Dificultades de Aprendizaje Específicas: Escolares con TDAH, Dislexia, Discalculia, etc., pueden experimentar una reducción significativa de su motivación escolar al sentir una constante frustración al no contar con herramientas o recursos que les ayuden a hacerles frente, sintiendo que tardan más que sus compañeros en hacer las tareas, necesitan quitar tiempo de otras actividades gratificantes para cumplir con las obligaciones escolares y, además, el resultado obtenido no es consecuente con el tiempo invertido.
6. Problemas sociales: Los problemas sociales, como el acoso escolar o la ausencia de relaciones sociales positivas, pueden afectar negativamente la motivación escolar ya que suele ser en éste en el que se desarrollen esas dinámicas o donde se haga latente la ausencia de las mismas.

Te invito a visitar esta entrada de mi blog personal en la que te cuento cómo solucionar problemas de motivación con estrategias muy claras y sencillas. Estoy seguro que muchas de ellas no las conoces.

Artículo escrito por Juan José Millán.