Videojuegos y conducta infantil escolar
No es la primera vez que afirmamos que los videojuegos no son tan terroríficos como muchas veces parece tras escuchar ciertos comentarios y determinadas recomendaciones. Los videojuegos favorecen muchísimos aspectos del desarrollo de nuestros hijos. Ayudan a desarrollar la coordinación visomotora, entrenan el tiempo de reacción y la atención en diversas variantes (ayudan a mantener la atención sobre un estímulo, a dividir los procesos atencionales, etc.)
Esta entrada no versa sobre las ventajas de los videojuegos, que las hay y muchas, sobretodo en determinados juegos que son magníficos para aspectos tales como la orientación visoespacial y otros muchos aspectos. En esta entrada vamos a hablar de un estudio publicado recientemente en Anales de Neurología) en el que se observó a 2.442 niños y niñas de entre 7 y 11 años. Esta investigación pretendía estudiar sus hábitos de juego y establecer ciertas relaciones entre las horas de juego y los resultados escolares. Puede acceder al artículo de esta investigación desde aquí.
El estudio ofrece unos resultados que no dejan indeferente a nadie. De los 2.442 niños, el 80% eran jugadores. Se estudiaron sus resultados académicos, que se vieron mucho mejores en jugadores que en no jugadores. Se realizó una resonancia magnética a los niños y se observó que existía mejor comunicación en los circuitos cerebrales que se encargan del aprendizaje.
Como puntos negativos se observó que a más horas de juego los resultados comienzan a ser contraproducentes, pues se empezaban a encontrar que los niños y niñas que superaban las 9 horas de juego a la semana presentaban problemas de conducta en el Colegio. Claro, la discusión está servida: ¿existe una relación directa entre jugar a videojuegos durante más de 9 horas a la semana y tener peor comportamiento o incluso alteraciones conductuales, o más bien existe una relación entre el niño que juega más de 9 horas a la semana y sus hábitos de sueño que inciden directamente en la conducta? En dicha investigación se incide en este aspecto: los niños que juegan más de 9 horas a videojuegos duermen menos horas que los demás.
El sueño es de vital importancia durante la edad pre-escolar y en la edad escolar. En esta entrada del mes de agosto, ya ofrecíamos algunas pautas acerca de cuánto tienen que dormir los niños según las recomendaciones de la Academia Americana de Pediatría.
Sea como sea, los videojuegos ofrecen muchos aspectos muy positivos. La clave está en elegir el videojuego apropiado y alejarnos de otros tantos llenos de contenidos dañinos para nuestros hijos ya que no ofrecen nada que otros videojuegos mucho más apropiados para nuestros hijos no tengan.
La mesura, la lógica, el sentido común y el conocimiento de los hijos es, sin duda alguna, la mejor clave para guiarnos a través de estos mundos de videojuegos.
Como siempre, quedamos a su disposición para cualquier consulta que quiera realizarnos.
Feliz domingo a todos.